Los jóvenes de la UVI en el XI Congreso Mexicano de Etnobiología.
El XI Congreso Mexicano de Etnobiología, celebrado del 11 al 15 de junio en Morelia, Michoacán, anunció las tesis de licenciatura ganadoras del premio “Miguel Ángel Martínez Alfaro” su por contribución etnobiológica.
El primer lugar fue para los estudiantes Esmeralda Campos Vásquez, Yanet González Gutiérrez y Félix González Ramírez, de la Licenciatura en Gestión Intercultural para el Desarrollo (LGID), de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI), sede Las Selvas, con la tesis “El algodón nativo (istáichka’ y koyóichka’): patrimonio biocultural de las mujeres nahuas de Mecayapan, Veracruz”. El cultivo de este tipo de algodón está desapareciendo, a la fecha sólo se cultiva en traspatios y el conocimiento acerca de esta planta se concentra en un grupo de seis mujeres de edad avanzada.
El segundo lugar fue para Eliseete Ramírez Carbajal con la tesis Etnomicología en la zona tlahuica pjiekakjoo del Estado de México, de la Universidad Intercultural del Estado de México. Su tesis plasma la importancia de los hongos en una de las comunidades más micófagas de México y el mundo -el pueblo pjiekakjoo- al consumir más de 160 especies de hongos comestibles, como el mazorquita u olotito (Morchella sp), una especie muy apreciada dentro del por su exquisito sabor.
El tercer lugar fue para Marely García Sánchez, egresada de la Licenciatura en Biología de la Universidad Veracruzana (UV) en la región Orizaba-Córdoba, con la tesis “Etnobiología de caracoles de agua dulce (Gastropoda, Mollusca) en la comunidad de Los Luceros 1era sección, Salto de Agua, Chiapas”. Los caracoles de agua dulce, conocido popularmente como chuti, son pequeños organismos acuáticos que habitan en ríos y arroyos y, para las comunidades de la Sierra Norte de Chiapas son muy importantes como alimento y como fuente de ingresos ya que se comercializan en mercados locales, por ello es muy importante la conservación biológica y ecológica de la región, así como el aspecto cultural y gastronómico, que se han mantenido vivos gracias a la oralidad, de generación en generación. A la fecha no hay suficiente información sobre este grupo de animales, por ello la tesis de Marely García fue galardonada.
La buena respuesta de los estudiantes del país demuestran que los jóvenes de pueblos originarios están interesados no sólo en conservar su patrimonio biocultural, sino en acrecentarlo y mejorarlo, como han hecho sus antepasado. Bien por ellos y felicidades a todos los participantes!
